Os preguntareis el porqué del título del post, es muy simple, era el lema de una campaña contra el abandono de animales hace unos años.
Y esto es lo que le ha sucedido a este Pino Thumbergii, un cliente lo abandono en la guardería de mi escuela hace más de 5 años.
Voy tratar de ir recuperándolo, el primer paso es trasplantarlo, que le hace falta y así trataremos de recuperar su vigor.
Su antiguo dueño corto la rama baja derecha en contra de mi opinión, intentare plantarlo un poco más inclinado a la izquierda, con el fin de que en el próximo modelado la primera rama de la izquierda no quede tan arriba.
Dejamos sobre lo seco el sustrato para facilitar el trasplante.
Dado que el tiesto tiene un reborde interior y seguramente estará lleno de micorrizas la única forma de sacarlo es usando una hoz de trasplante.
Efectivamente, lleno de micorrizas.
El fondo estaba lleno de raíces.
Quitamos tierra y cortamos raíces.
Trabajo terminado por el momento…..